Reciba con gran amor un fuerte abrazo y saludos venezolanos.
En Venezuela estamos agradecidos con Dios por el apoyo de la Junta de Misiones Mundiales a través del Programa de Educación Infantil, el PEPE. Este programa nos ha estado entrenando con una herramienta valiosa, tan asertiva que nos permite ayudar a la comunidad en estos tiempos difíciles que vivimos como país al ofrecer la oportunidad de estudios básicos, abrigo, amor, alimentación, salud, ropa y calzados que difícilmente podríamos dar a los niños y niñas menos favorecidos, que hoy son muchos viviendo sin este apoyo.
Este programa abrió la puerta para que seamos instrumentos de Dios para llevar un mensaje de esperanza a los niños y niñas, a las familias, a la comunidad, a la ciudad, al estado y al país en general. Comenzamos en 2016 con 6 unidades de PEPE en el estado portugués, ofreciendo no más que educación básica y sembrando la Palabra de Dios en sus vidas. Observamos que, desde julio del 2017, no solo hemos ofrecido lo anterior, sino que también hemos tenido la oportunidad de asegurar un refrigerio y, en algunos casos, incluso alimentos, porque hay hermanos entre el pueblo de Dios dispuestos a dar más allá de sus recursos compartiendo con su prójimo de lo que Dios les ha dado.
Hoy en Venezuela, este programa nos ha permitido crecer y madurar de muchas maneras. Tenemos 69 unidades del PEPE en 15 de los 23 departamentos del país, con 139 Misioneros Educadores, 5 coordinadores de área oficiales y 6 coordinadores de área voluntarios. Sirven a 1.602 niños y niñas y en el transcurrir del 2019, de las 806 familias contactadas por el PEPE, ya llegamos a 506 decisiones para Cristo.
Nuestro gran desafío y nuestro deseo más profundo es lograr la excelencia en cada unidad del PEPE. Seguimos clamando por la crisis venezolana y también intercedemos por las necesidades básicas del pueblo. Que Dios provea alimentos, útiles de higiene personal, útiles escolares, medicinas básicas, ropa, calzados y reconocimiento económico a los Misioneros Educadores.
“¡Venezuela está infinitamente agradecida por la llegada de la JMM a través del PEPE! Para nosotros, el programa significa buenas nuevas, una solución y esperanza para este país en situación de emergencia «.