El Salvador es uno de los países más pequeños de América Central, vecino de Guatemala, Honduras y Nicaragua, con 6.643.000 habitantes. Allí, hemos estado trabajando con el PEPE desde 2014, y este año estamos atendiendo a 479 niños en las 24 unidades de PEPE que tenemos en el país.
Cuando Covid-19 llegó a nuestro país, entramos en una gran crisis a nivel nacional, ya que muchos miembros de la familia estaban en aislamiento social y no tenían forma de trabajar para llevar comida a sus hogares. Lo mismo ocurrió en nuestros PEPEs, que se encuentran en áreas de bajos recursos, ya que muchos de estos niños/as reciben la única comida del día en el PEPE.
Preocupados por nuestros niños del PEPE, todo el equipo nacional se unió para obtener donaciones de alimentos. Se hizo una llamada en las redes sociales, la Asociación Bautista Juvenil, la organización CONVOY OF HOPE y otras organizaciones que atendieron nuestro llamado enviando alimentos. En una de nuestras unidades ubicadas en la región sur, la Alcaldía de la comunidad también se unió a nosotros, distribuyendo alimentos básicos que permitieron bendecir los hogares de nuestros niños/as.
Sabíamos que solos sería difícil, pero juntos logramos armar canastas básicas de alimentos y llevar comida a 250 alumnos del PEPE. Como equipo del PEPE, continuamos pidiendo a aquellos que desean donar porque, además de la necesidad de llegar a otras comunidades, debemos continuar ayudando a estas familias, ya que la comida es una necesidad constante.
Oramos a Dios por su provisión para cada una de las familias de nuestros alumnos de los PEPEs.
Verónica Torrento
Coordinadora nacional PEPE El Salvador
Edición de texto: Carmen Ligia – coordinadora continental PEPE Américas