El PEPE en Malí tiene siete unidades que están funcionando bien a pesar de los desafíos que plantea el contexto religioso, político y económico. El equipo está compuesto por un coordinador nacional, 18 Misioneros/as Educadores/as y un voluntario extranjero. Este equipo realmente ama este ministerio y trabaja duro por el bien de los niños/as.
¡Los proyectos complementarios son una muy buena iniciativa! Justo después de las capacitaciones, comparto con el equipo todo lo que aprendí durante la capacitación en línea. Ya hemos implementado las actividades de nutrición; realizamos un taller de cocina con los niños/as, con el fin de enseñarles, de la mejor manera, que todo lo que comemos debe ser saludable y, en el mismo sentido, implementamos actividades deportivas (psicomotricidad) que contribuyen al desarrollo del niño/a.
Nada más terminamos la jornada deportiva, a los niños/as les encantó y la siguen pidiendo siempre, quieren que la hagamos todos los días. Estas actividades forman parte de la estructura de las actividades educativas con los niños/as. También estamos planeando concienciar a los padres sobre la nutrición saludable en una fecha posterior.
En dos unidades del PEPE, también se creó una huerta, que ayuda a la comunidad y al PEPE en N’darala y Manatali con la estructura nutricional y los ingresos de las familias.
El único proyecto complementario que no se lleva a cabo aquí en Malí es el POPE. Los obstáculos socioeconómicos nos están frenando. Estoy haciendo todo lo posible para asegurarme de que el próximo año podamos comenzar el POPE.
Nos regocijamos de que el PEPE exista en Malí y oramos para que el Señor abra las puertas y hable a los corazones de los líderes para iniciar nuevas unidades de PEPE en todos los lugares necesitados de Malí.
Ore y contribuya por el PEPE.
Amos Dembele – Coordinador Nacional.
Traducido por: Nadia Naiara Veras Araújo